El Tricicle, 30 años y como el primer día

Por unos u otros avatares hacía tiempo que no salíamos al teatro. Por fín, ayer, pudimos hacer una escapada y fuimos a la Gran Vía a ver El Tricicle con Ajo y Gori.
Antes, paramos a reponer fuerzas en el Mesón del Jamón que hay al lado del teatro.
Como últimamente los amigos nos dicen que la ley antitabaco está haciendo que los locales se queden medio vacios, dichosos ellos que salen, pensabamos que habría bastante sitio.
Pues no, para nuestra sorpresa estaba a tope, no cabía un alfiler y tuvimos que esperar un buen rato en la barra, eso sí con una cerveza bien fria y una ración de ibericos.
Nos toco en un rinconcito al fondo del local, tras un angosto pasillo y los cuatro pensamos ¿os imaginais ésto con la gente fumando?, ¿cómo se ha podido soportar durante tanto tiempo?.
Después del atracón, sin humos, nos fuimos a disfrutar del Tricicle y ... Diosssss, qué gozada, como el primer día, humor fresco, limpio, intenso ... Nos reimos con ganas, nos olvidamos por un rato de los problemas y volvimos a recordar cuando los vimos por primera vez ... sin trabajo, sin complejos, sin un duro pero mucho más jovenes.
Por cierto y el teatro también a rebosar.

Feliz semana.

Cuanto tiempo libre hay que tener ...

Uffff, cuanto tiempo libre tienes!!
Es la frase de alguna gente cuando le enseñas todo ilusionado el blog.
¿Qué quieren decir?

¿Que el tiempo libre que tengo lo dedico a escribir en un blog ... una entrada semanal?
¿Que no tengo aficiones mejores que las de estar en el ordenador ... 5 minutos a la semana?
¿Que no tengo amigos o familia con la que pasar el tiempo?
¿Que soy un puñetero vago que no trabajo y me dedico a escribir?

La verdad es que hay especialistas en intentar jorobar al prójimo.

Gente que cuando te compras con toda la ilusión un coche te dice lo mucho que consume ó que el color elegido es muy sucio.
Gente que cuando le cuentas algo bonito que te ha pasado tiene una habilidad pasmosa para desmontartelo y echar por tierra tu ilusión.

En el fondo supongo que es la envidia por no ser ellos los protagonistas de lo que le enseñas o le cuentas.

Para los últimos que han comentado, uy, cuanto tiempo libre hay que tener para hacer esto, sólo decirles que, para una entrada semanal, con 5 ó 10 minutos hay de sobra.
Eso es bastante menos que lo que otros u otras dedican a estar en el gimnasio, o en el bar, o de compras, o viendo escaparates, o en los toros, o en el futbol o donde les de la gana, porque de lo que se trata es de que cada uno se dedique a lo que le gusta y no de intentar desilusionar al prójimo.

Feliz semana.