domingo, 28 de marzo de 2010

Arroz en Pampliega


Y qué arroz, para chuparse los dedos!! Esto lo negaré delante de Miguel pero ... qué pedazo de arroz cremoso le salió. Claro que como bien decía Benjamín con lo que llevaba (buey de mar para un regimiento y langostinos para un batallón) como para que le saliera mál.

Pampliega, la finca de Pepe y Benjamín está en Rivas, junto a la Marañosa, pegada al Manzanares y muy cerca de donde se une al Jarama. El sabado la finca estaba preciosa, sembrada de trigo, era una alfolmbra verde. Bien cercada para que los numerosos conejos no se cuelen. El rio bajaba como pocas veces lo había visto, por fín parecía todo un rio, incluso limpio.
Lastima que ya no haya toros. Hasta hace cuatro ó cinco años, a unos quinientos metros aguas arriba pastaba una ganadería de toros bravos. En primavera y verano esa zona tenía una vista idílica, la Marañosa al fondo, el río a un lado, el camino bordeando una fila de trincheras de la batalla del Jarama al otro y en el centro los toros. Por el camino numerosos ciclistas, senderistas o gente a caballo como el que escribe mirando con un ojo el espectáculo, digno de un cuadro del mejor paisajista y con el otro mirando la cerca que separa la ganadería del camino y que básicamente se componía de troncos de olivo clavados cada varios metros unidos por dos o tres filas de alambre de espino que, ante la embestida de un toro del tamaño de los allí presentes no parecía en absoluto resistente. Afortunadamente ir subido en mi añorado "Apache", mi caballo pinto, me daba cierta tranquilidad, creo que bastante más que a los que iban en bicicleta.

Al otro lado, la segunda linea de trincheras, en la batalla del Jarama, los hombres de Modesto, "El Campesino" y "Walter" defendiendo Madrid del ataque de las tropas franquistas de Orgaz y de Varela. Cuánto esfuerzo, cuanto sacrificio y cuanta sangre derramada por aquellos valientes, muchos de ellos extranjeros, como los del batallon Lincoln,para evitar que cayera la capital en manos de los sublevados.
Todavía se me ponen los "pelos como escarpias" cuando oigo a alguno de los pocos que, por la edad, todavía viven, tararear aquello de "ther's a valley in Spain called Jarama ...").

Cuando llegamos a la finca Miguel y Fernando ya tenian todo preparado y el enorme caldero comenzaba a calentarse en el fuego que probablemente habrían encendido Pepe y Benjamín. Allí ya estaban además de ellos, Celina, Julia, Choni, Miguel Ángel, Ana, y Juan Carlos.
Poco a poco fueron llegando los demás, María, Teodora, Begoña, Charo, Jesús, Pilar y Carlos.

El tiempo era espléndido, la hora, el campo y el olor que salía del caldero invitaban a que todos, en mayor o menor medida (según tamaño) fueramos picando un excelente queso que Miguel Ángel no paraba de cortar, acompañado de un Viña Albali del 2004 que habíamos llevado Elena y yo (hay que hacer patria y ahora hay vinos de Valdepeñas, como éste, que no tienen nada que envidiar a los riojas o riberas con mucho más marketing detrás).

Al poco, Miguel consideró que el arroz estaba en su punto (y la verdad aunque me duela reconocerlo es que acertó) y entre risas y vino dimos buena cuenta del arroz, las patas de buey de mar, los langostinos y cuanto tropezón caía por el plato en las variadas repeticiones que más de uno realizamos. Y entre bocado y bocado ya se sabe, que si el atleti le va a hacer un roto al madrí, que si Cristiano le va a meter 3 el solito, que si es una vergüenza lo del caso Gurtel, que si lo que están haciendo con Garzón no tiene nombre ...

Para desengrasar, la queimada de Miguel que no podía faltar y lo de siempre: que le dés vueltas más deprisa, que le estás dando demasiado rápido, que se va a quedar muy dulzón, que ... que sería de estas comidas sin poder criticar al maestro de ceremonias correspondiente.

Trás la comida, el vino, los chupitos, y la queimada, la mayoría nos decantamos por un paseo por la finca, mientras el equipo de mus prefería quedarse a hechar una partida. Con la temperatura tan agradable que hacía fue un paseo que nos sentó de maravilla. Bordeamos toda la finca, primero la zona de huerta en la que el día antes habían estado recogiendo esparragos con los que, nos contó Jesús, se habían cenado una exquisita tortilla. Después la zona que linda con el Manzanares y que ya he comentado más arriba, venía precioso, con mucha agua y fuerza. Benjamín nos enseñaba las zonas por las que los conejos intentaban pasar y que él, a su vez, taponaba.
Después de un rato de lo más agradable volvimos a la casa en la que encontramos a los museros igual que los habíamos dejado es decir con las cariñosas expresiones que acostumbramos a utilizar cuando se está en una partida, cabestro que no se quiere con 2 pitos, animal como quieres a grande sin pares, zopenco como pasas sin hacerme ninguna seña y otros piropos similares.

Bien entrada la tarde comenzamos a recoger y fuimos desfilando cual voluntarios de las brigadas internacionales, no sin antes haberse barajado varias alternativas gastronómicas para la próxima.

sábado, 20 de marzo de 2010

Voy a ser abuelo ...uffff


Todavía hoy no me lo creo y eso que han pasado ya mas de dos meses. Tenía que esperar un tiempo antes de escribir nada sobre esto (nada que se viera). En realidad, en papel, bien guardado, tengo varios folios pero creo que en el futuro me arrepentiré de lo que escribí. Creo que lo mejor es romperlo para no dañar los sentimientos de una de las personas a las que quiero más que a mi propia vida ... aunque me haya dado tantos disgustos.

Me animo hoy porque ahora sí me siento muy feliz, contento e ilusionado. Además, el jueves me llamó Carlos para darme la noticia. Acababan de salir de la consulta y me llamó para decirme que todo iba bien y que ... va a ser niña!!
Fue un momento precioso, espero que el primero de otros muchos.
Claro que lo más importante es que todo salga bien y que el niño ó la niña esté y nazca bien pero ahora, después de haber tenido 2 hijos varones, no puedo negar que me hacía ilusión que fuera niña.

Ese mismo día le compraron un vestidito minúsculo, precioso y una faldita diminuta, con volantes que era una maravilla.
Es una de la cosas que más alegría me producen, verles tan ilusionados.
Carlos, últimamente, no para de hablar de la ropa que ya tienen, de lo minúscula y lo bonita que es. Le hace fotos en las que compara su tamaño con el de la ropa de adulto.
Empiezo a verle con un estado interior de mayor calma. Ahora sí empieza a salir a la superficie su ilusión aunque el miedo a lo que se le viene no creo que le haya desaparecido.
La semana pasada comenzó a trabajar con sus tios. Esto le ha dado algo más de seguridad y de confianza. Espero, de todas formas, que sea capaz de continuar con el curso y de aprobarlo.
Toda la familia se ha volcado con él. Sabíamos que no sería de otra forma pero aún así, es gratificante ver como todos han tenido palabras de ánimo y de apoyo. Ni una palabra negativa en nadie, todos señalando el lado bonito del asunto, todos pensando en positivo.

Elena también está feliz de que sea niña. Ella, además, con 3 hermanos lo deseaba, creo, más que nadie. Sólo hay que ver como adora a sus sobrinas, cómo las quieres y cómo disfruta con ellas y ellas con su tía Elena. Lo está llevando muy bien, desde el principio con gran entereza y sentido práctico.

domingo, 14 de marzo de 2010

34 años después ... nos volvimos a ver.


Pues sí, 34 años después nos volvimos a ver.
Qué gran idea y que gran iniciativa la que tuvieron Raúl y alguno más. Convocar a una comida a los que acabamos en el 76 en el Instituto Rey Pastor.

Algunos nos habíamos vuelto a ver en algunas ocasiones pero la gran mayoría no nos veíamos desde el verano del 76 (ya ha llovido).
Confieso que la noche anterior estaba inquieto. No paraba de preguntarme ¿cómo estarán? ¿cómo me verán? ¿nos reconoceremos?

Sí que fue emocionante. Luis y yo llegamos de los primeros. Allí ya estaban los 3 monzon, siguen igual, Salva tan alegre como siempre, Jemi con menos pelo pero por lo demás igual. Enseguida fueron llegando los demás y los Ohhhhh, Ehhhh, Alaaaaa eran continuos.
Con alguno hubo que tirar de fotos para reconocerle. Yo me ví en alguna (una excursión a Navacerrada) y hubiera jurado que no era yo (que pintas!!).
Qué chasco con Blanca (una de las que más me gustaban de clase), al principio no me reconoció hasta que no me vio en fotos, igual que Isabel.

Poco a poco fueron llegando todos, creo que unos 30. Después de un buen rato de saludos, abrazos y frases del estilo de: ¿te acuerdas cuando ...? Aquello parecía Cuéntame.
Por fín pasamos al restaurante, era en la 2ª lonja (cuanto tiempo desde que no iba por allí), en el restaurante "El rincón de Pepe". Creo que la comidad era bastante buena, y digo creo porque lo que menos hicimos fue comer. Pareciamos adolescentes contandonos las peripecias del último verano con la diferencia de que en esta ocasión era contarnos ... una vida entera.

Me casé, yo nó, yo me divorcié, tengo hijos, yo tengo 2, yo tengo uno, yo tengo tres, trabajo en ..., monté una empresa de ...,me quedé como PNN en la facultad, dejé derecho y me pasé a económicas, has vuelto a ver a ...?
Entre medias los recuerdos de aquellos años, te acuerdas cuando le quitamos el bocadillo a los de inglés?, te acuerdas cuando casi nos calza una leche uno de los "grises" cuando las manifestaciones pidiendo la libertad del hermano de Isabel?, te acuerdas cuando a la de francés se le cayeron los pantalones en clase? y cuando en el viaje de 6º nos metimos todos en la misma habitación? y cuando en una discoteca de LLoret alucinabamos viendo como se metian mano unos extranjeros? ... lo dicho Cuentame.

Las chicas estaban igual que como las recordaba, Menchu (el bombón de la clase, que pena que no viniera su mejor amiga Mª Paz)recordamos cuando me vinieron a ver a casa cuando estuve con hepatitis, como presumí después con los amigos, Isabel (la lider estudiantil), Charo, Moratalla, Machota, Margarita (con los mismos ojos verdes de entonces), Olga (con otro pelo pero la misma cara, pero la misma, eh), Mª José, Carmen Campanario (tan simpática como siempre, menos tímida que aquellos años y ahora toda una fotografa), Susana (que me pasaba la revista del PTE y ayer no me reconoció), Pilar (la más sensata y responsable), Maite (ahora empresaria... tenemos que ir a su Casa Rural) Blanca ...

Los chicos hemos cambiado más, sobre todo los que nos hemos recortado el flequillo casi al cero.
Raúl sí seguia igual (aunque a él si le había vuelto a ver), Antonio con el mismo vozarron de siempre, Chencho incluso parecía más joven, Jesús "Guti" estaba igual (el "dandy" de aquellos años, recuerdo como nos dejó alucinados en una excursión cantando "a capella" Yesterday), a Luis le veo a menudo en Rivas, Manolo con más kilos que entonces, Carlos de la Cruz tiene menos pelo pero está igual, con él recordaba los tiempos del colegio Conde de Arruga (al que todos llamábamos Conde Berruga), recordábamos al entrañable don Elías y al director don Francisco que un dia me dió un sopapo que nunca olvidaré (por quedarme embobado mirando a las chicas que acababan de entrar en el aula el primer día que nos juntaron en la misma clase a chicos y chicas).
Vinieron también algunos del grupo de ciencias a los que conocía menos, sólo de vernos en los recreos como Mario, Paco, Agustín ó Silvia que, cosas del destino, ha acabado de pareja, desde hace mucho, con un antiguo camarada de correrías políticas.

A las 7 de la tarde todavía no habíamos pedido la cuenta ensimismados en los recuerdos y en ponernos al día con nuestras vidas.

Después de pagar continuamos la charla en la zona de bar. Jesús quedó responsable de la lista de teléfonos y email y yo de hacer la correspondiente págína en Facebook en la que colgar las múltiples fotos que algunos hicieron.
Y a las 10, bastante alegres, y no solo por la alegría de vernos, comenzamos a despedirnos algunos y otros continuaron ... ya nos contaran en facebook hasta cuando.
La consigna que circuló fue que hay que repetirlo y a ser posible antes de que vuelvan a pasar otros 34 años

viernes, 5 de marzo de 2010

Vaya semanita

Pues sí, esta semana tocaban ferias y otras malas hierbas.

Comenzó la semana con un seminario organizado por el IIR sobre el Almacen Automatizado y desde el coche al hotel me cayó más agua que a Noel en el arca. El parking del hotel estaba completo y tuve que aparcar donde Cristo perdió el mechero (hoy estamos bíblicos). Menos mal que uno es un atleta de largas y fuertes piernas ( hoy también toca autoalabanza).
Afortunadamente valió la pena el "mojamiento". Fueron unas ponencias interesantes y muy concurridas. Además, pude saludar a varios clientes reacios a invertir sus escasos presupuestos publicitarios en MyA y hacerles ver algunas de las multiples virtudes que tiene anunciarse en el medio logístico por excelencia (con permiso de Mercedes).
El martes se celebraban las 32 Jornadas de Logística del CEL. Un completo éxito de crítica y público.
Ponentes y ponencias de gran nivel aunque, la mejor, por supuesto, la moderadora de la Mesa sobre Gestión de Riesgos... Carmina.
La comida prometía, no sólo por lo gastrónomico sino también porque estábamos numerosos colegas dispuestos a hacer unas risas entre bocado y bocado. Sin embargo la logística gastronómica fue manifiestamente mejorable y había que ir por un plato de paella con el cuchillo entre los dientes.
Como no era sentados, Carmina y yo nos situamos estratégicamente en uno de los lados del salón para poder apoyarnos contra la pared (que uno tiene ya la pelvis con más fisuras que los platos romanos encontrados en Segobriga) y bien situados para preparar emboscadas a las escasas bandejas de comida.

Camino de la estación le conté a Carmina la "hazaña" de Carlos (otro día hablaré de este tema).

El miercoles a Sicur. Creo que nunca he recorrido los pabellones más deprisa (por aprovechar el poco tiempo disponible y por la falta de potenciales clientes).
Sí que ví entre otros a mis amigos de Siemens, Enrique y Nathalie.
También me encontré con Maribel, de CIC, poco antes de que se volviera para Barcelona. Vaya ojos tan bonitos que tiene, no me extraña que venda un montón.

El jueves, a las 5:00, para arriba (aunque me había despertado a la 4:30) para llegar con tiempo al AVE y salir hacia Smagua.
Lo del AVE es una pasada (lo siento Iberia pero te seguiré siendo infiel). Estaba acabando el períodico, después de tomar un cafetito bien caliente y ya casi estaba en Zaragoza.

Smagua sigue manteniendo el tipo. A pesar de lo que está cayendo, ha conseguido mantener unos resultados más que aceptables en lo que se refiere a número de expositores y de visitantes.
Con la azafata, futura maestra según me contó, tuvimos suerte. Liquidó en un santiamén el pabellón que faltaba por distribuirse revistas y en el stand no dejaba visitante sin asaltar su tarjetero (el de las tarjetas profesionales).

La vuelta de primera, en primera. Sí, me habían conseguido un billete en primera por una oferta muy económica y volví con las atenciones habituales a los vip y que yo no había "catado" hasta ahora.
Desde que me senté una procesión de azafatas (a cual más agradable) desfiló por el pasillo sin parar: ¿desea algo de prensa? ... ¿quiere auriculares para escuchar la película? ...¿un pañuelo perfumado, caballero? ...¿le retiro ya el pañuelo? ...¿una bebida? ...¿va a cenar? y, casi sin tiempo para cenar, ... Madrid.